La clave para construir tu propio negocio inmobiliario es perfeccionar tus embudos de conversión, aprender a delegar y saber cuáles son las cualidades para ser un buen líder. Estos tres puntos son fundamentales si querés pasar de trabajar solo a hacerlo con un equipo y generar un negocio rentable que se sostenga y crezca en el tiempo.
No hay una única manera de emprender y de aprender a liderar equipos, pero sí es importante que tengas en claro tu visión para poder establecer un camino a seguir, objetivos y también una estrategia que te ayude a conseguirlos. La ausencia de claridad en estos aspectos es uno de los principales motivos por los cuales distintos negocios fallan.
Para convertirte en un gran inmobiliario uno de los primeros pasos es dar el salto del trabajo independiente a formar un equipo que te responda y se sienta motivado. Si te encontrás en esa situación y estás buscando crecer te invitamos a que leas este artículo para conocer cuáles son las etapas por las que tenés que pasar en este proceso y cómo podés convertirte en un líder que otros inmobiliarios quieran seguir y con el que quieran trabajar.
En este artículo:
¿Cuáles son los pasos para crecer y llegar a liderar un equipo?
¿Cómo liderar y maximizar tu equipo inmobiliario?
Pasos para formar y motivar a tu equipoErrores frecuentes que obstaculizan tu crecimiento
Cualidades de un gran líder inmobiliario
Hay 4 pasos fundamentales que tenés que seguir para que tu negocio crezca y logres convertirte en un líder inmobiliario: saber mostrar y vender propiedades, aprender a captar inmuebles, saber liderar un equipo y saber emprender. Sin perfeccionar cada una de estas instancias es difícil que consigas generar un negocio que tenga éxito y se mantenga en el tiempo.
Para llevar adelante estas etapas recomendamos establecer objetivos y generar una estrategia clara. Es importante no omitir ninguno de estos pasos ya que todos aportan de forma gradual a tu crecimiento.
Saber mostrar y vender propiedades: lo primero que tenés que manejar bien es la comercialización de una propiedad, saber cómo se muestra, cómo es la parte de la negociación y cómo cerrar una venta. Todo buen inmobiliario debe dominar esta etapa del trabajo antes de avanzar hacia los siguientes pasos.
Saber captar inmuebles: una vez que sabés vender, tenés que volverte experto en la prospección. Esto implica generar tu base de contactos, aprender técnicas de marketing y publicidad para instalar tu marca y tu nombre, y desarrollar un embudo de conversión que funcione a lo largo del tiempo. Esto es lo que va a validar que estás haciendo bien tu trabajo y que podés pasar a la etapa de formar un equipo.
Liderar equipos: si dominás los pasos anteriores lo más probable es que te lleguen muchas propiedades y tengas más trabajo por lo que es el momento de armar un equipo de inmobiliarios en los cuales puedas delegar ciertas actividades. Ser líder no es fácil ya que tenés que formar a las personas, motivarlas y de a poco ceder partes de tu trabajo sin temor a que no lleven adelante las tareas de la misma manera que vos. Sin embargo, este paso es clave para que tu negocio crezca.
Saber emprender: para potenciar tu marca es necesario que empieces a delegar algunas tareas y que te enfoques en los aspectos más grandes de tu negocio: cómo atraer y retener talentos, cómo dar más visibilidad a tu inmobiliaria, cómo gestionarla de la forma más eficaz posible y cómo hacer que todas las etapas funcionen de la manera correcta para alcanzar tus objetivos. Para emprender vas a tener que ceder las tareas más chicas y ocuparte de validar procesos y hacer cambios cuando ves que algo no avanza como debería. Esta es la única manera de lograr que tu negocio escale.
Cada una de estas etapas puede llevar más de 1 año pero es importante no saltarse ningún momento del proceso y tener paciencia. Esta es la clave del éxito para construir un negocio rentable y sólido en este sector.
Puede pasar que te encuentres hace tiempo trabajando de manera independiente y te vaya bien, que consigas clientes y logres captar propiedades. Sin embargo, para que tu negocio crezca y te conviertas en un inmobiliario exitoso es necesario formar tu propio equipo.
Esto se debe a que para potenciar tu inmobiliaria vas a necesitar realizar cada vez más tasaciones y captar más propiedades y es probable que tu tiempo no alcance. Es por eso que vas a necesitar contar con personas que lleven adelante estas tareas.
Comenzar a formar un equipo puede ser desafiante pero si seguís ciertos pasos las probabilidades de que logres hacerlo de la forma correcta son mayores. La constancia y la paciencia son fundamentales en este proceso.
Cuando empezás a sumar corredores a tu negocio es importante que los acompañes en las distintas tareas, ya sea mostrar una propiedad o negociar el valor de un inmueble a favor de tu cliente. Este tiempo invertido al principio va a hacer que luego puedas delegar estos procesos y dedicarte exclusivamente a pensar en cómo hacer crecer tu inmobiliaria.
Lo primero que deberías delegar a tu equipo para empezar a formarlo son las actividades que se encuentran en la base del embudo, es decir el muestreo de propiedades, la negociación y la reserva.
Por ejemplo, podés ir junto al nuevo integrante de tu equipo a cinco negociaciones en donde sos vos el encargado de llevar adelante el proceso. Luego van a otras cinco en las cuales el responsable de esta etapa es él y vos te mantenés como observador para poder ver su desempeño y ayudarlo en caso de ser necesario. Finalmente, podés dejarlo avanzar con este proceso solo.
Si ves que este paso funciona correctamente ya podés continuar hacia otras actividades, como captar propiedades o la instancia de pretasación. Tené en cuenta que si querés crecer es imposible que seas vos el que se encarga de cada parte del proceso de la compraventa. Puede suceder que en algunos casos el resultado no sea el deseado pero es necesario pasar por estas situaciones para formar a tu equipo y que luego funcione correctamente.
Finalmente, una vez que los miembros de tu equipo pueden encargarse de estas actividades vos vas a poder dedicar más tiempo al nivel más amplio de tu negocio que tiene que ver con potenciar tu marca y empezar a competir con otras redes inmobiliarias o franquicias.
Hay ciertos errores que tenés que evitar si querés que tu emprendimiento inmobiliario crezca pero el más importante es la incapacidad para delegar. Si no sabés ceder algunas de las tareas menores a personas de tu equipo va a ser imposible que tengas el tiempo necesario para dedicarte a aspectos más importantes del negocio, como la gestión y la supervisión de los procesos.
Además de aprender a delegar, otro error que tenés que evitar es el de no tener tus objetivos claros. Sin esto no vas a poder generar una estrategia o planificación a largo plazo que te ayude a observar los procesos, encontrar los puntos en los que algo falla y realizar modificaciones.
Al mismo tiempo, si no tenés una meta específica va a ser más difícil que logres motivar a tu equipo y formar un buen ambiente laboral. Para que la gente decida seguirte tiene que confiar en que sabés hacia dónde estás yendo aunque no sepas del todo de qué forma conseguirlo o qué estrategia utilizar. De lo contrario, es probable que las personas prefieran trabajar por su cuenta o ir a otra inmobiliaria.
Para convertirte en alguien que otros inmobiliarios quieran seguir es fundamental que cuentes con ciertas cualidades que hacen la diferencia entre un jefe y un líder. Muchas personas pueden contratar gente y dar órdenes pero no todos van a saber cómo liderar a esas personas y lograr que se mantengan motivadas y con ganas de formar parte de un equipo.
Aprender a ser un líder que inspire a otros es clave para que tu negocio crezca y se potencie. Por eso es importante que hagas sentir valoradas a las personas que forman parte de tu equipo, que escuches sus opiniones y reconozcas sus logros. Además, establecer ciertos valores que todos compartan va a hacer que todos sientan que forman parte de un ambiente laboral amigable y que van hacia el mismo lado.
Algo importante también es poder reconocer tus errores y realizar modificaciones cuando sea necesario, ya que esto te muestra como un líder flexible y que forma parte del equipo y no se ubica necesariamente en una posición superior. Sin embargo, esto tiene que ir de la mano con saber poner límites ya que no debe perderse de vista que sos vos quien toma las decisiones y quien tiene la responsabilidad final y la autoridad.
Finalmente, tener una visión clara de hacia dónde querés que vaya tu negocio y poder expresarla al resto del equipo va a hacer que las personas se mantengan motivadas y que sientan que sus tareas tienen un sentido. Es por eso que mostrarte enérgico y con una dirección estratégica es igual de importante.
Si querés hacer crecer tu negocio y formar tu propio equipo podés comunicarte con nosotros a través de nuestro WhatsApp y conocer más sobre cómo funciona deinmobiliarios. En nuestra red respetamos la identidad y la marca de los corredores que se suman a la vez que potenciamos su trabajo con herramientas digitales y la posibilidad de conocer gente con la cual trabajar o asociarse.